Amor de mi vida!
Es increíble como todo se resume a los hombres. Les explico. Justo en ese momento en que mi cabeza es poema de la confusión que causan individuos del tercer tipo, me toca cubrir por parte de Revista Agenda la presentación de la Colección Spring-Summer 2014 de Chanel, en el American Trade Hall. Esta línea la conozco muy bien pues escribí sobre ella para la edición de diciembre de la revista y además he visto una infinidad de veces la pasarela en vivo.
No les voy a mentir. No tengo mucha experticia manejando bolsos Chanel, siempre han sido como una gran utopía para mi, casi un mito, así que este evento iba a ser la manera perfecta de poder conocer las piezas más emblemáticas de la marca y de paso decidir, de una vez por todas, si soy una chica clásica de 2.55, o una moderna que gusta del modelo Boy. ¿Ya ven por donde va esto? Pues si, en medio de muchas mujeres vestidas de Chanel de pie a cabeza, con Calle 13 sonando en mi cabeza, llegué a la conclusión de que una de las mejores cosas que me podría pasar en la vida es tener un modelo BOY. OH BOY, OH BOY! Que sueño de bolso. Sus líneas geométricas perfectas, con líneas que me recuerdan esculturas perfectas, rombos acolchados, y esa cadena, esa cadena imponente con la que cuelga de tu hombro. Simplemente perfecto.
Pues si, en efecto, hasta en la moda, en esa sublime expresión de arte que tanto amo, se reduce a un miembro masculino: A BOY!
¿Estaré condenada?
xx
Alex