Todas debemos aprender una que otra cosa de Kim Kardashian. Una de las que yo he aplicado a mi vida es el uso de tonalidades neutrales en un solo outfit. Es decir, adiós pedrería y colorinche, todo un look armado con tonalidades que van desde la más extensa gama de nudes hasta el verde olivo pasando por el infalible negro.
Hace algunos años los neutrales solo eran blanco, negro y beige. En pleno 2016, y gracias a la influencia de muchas celebridades que han hecho de la simplicidad si carta de presentación, lo que se considera un canvas para ponerse creativo va mucho más allá. Temporadas como el otoño tienen gran protagonismo pues es ahí donde se hacen populares tonalidades como el caqui en todas sus variantes y el rojo vino, que en piezas lisas puede ser un gran aliado para jugar con la monotonía.
A esa lista me atrevo a agregar la tela de denim o mezclilla. Al igual que el blanco o el negro es el canvas perfecto para dar rienda suelta a la imaginación en looks casuales. Si quieres elevarlo un poco más, mi favorito es el nude en sus tonos más quedamos: el camel o el marrón. Kim Kardashian de la mano de su marido Kanye West han hecho de estas tonalidades los aliados perfectos de lo que se considera chic.
Para romper la gama de neutrales nada mejor que accesorios grandes y brillantes. Bueno, no en el caso de Kim pero si en el mío. Para estos tonos me encanta usar accesorios dorados que le den vida al look y también un toque personal.
Y después de mucho estudiarlo heme aquí... usando todos los nudes de mi clóset en un solo look. Dios bendiga a Kim Kardashian.
xx
Alex