Desde que estoy en la televisión una de mis pasiones en poder arreglarme rápido. No tengo tiempo para nada y es justo y necesario lograr estar fabulosa en los 10 minutos que generalmente tengo para subir al apartamento y bajar. Para lograrlo, es muy importante tener listo ya el maquillaje y peinado. Sin pena les digo que lo reciclo del programa en la mañana y le ruego a Dios que esté decente para la noche.
Una vez tenemos ese punto cubierto, tenemos que recurrir a esas piezas que con solo ponérnoslas estamos listas. Estoy hablando de esos vestidos a la rodilla o a medio muslo que son ultra vestidores y que solitos ya dicen todo. Es uno de esas opciones que toda mujer debe tener en su armario, es la punta de lanza de este post y la principal herramienta que debes tener para lograr tu cometido. En este caso, me separo del clásico Little Black Dress y apuesto por un vestido tubo con cuello halter en amarillo mostaza que, además de ser cómodo, es muy versátil.
El segundo paso es escoger los zapatos. Como estamos de afán no lo pensamos mucho y apostamos por esos clásicos que combinan con todo. Ese es el caso de mis sandalias Stuart Weitzman que tienen ese toque perfecto de dorado que da luz a cualquier look.
Ahora, los accesorios. Esta vez opté por una opción delicada y fácil de lograr. Como los zapatos son dorados simplemente agregué mi dije de labio de Braganza, que combina a la perfección con las dos cadenas que uso a diario. A juego van los aretes y los bellos anillos, también de Braganza. Después de la joyería está la cartera. Cartera negra que hace juego con todo y rompe el dorado y el amarillo, y BAM, GOOD TO GO.
Cómoda, elegante y lista en diez minutos.
¡Inténtalo!
xx
Alex
