Articulos SHSM

Revistas: Lo creas o no, hay gente que llora porque pierde una edición de VOGUE.

Por Alexa Carolina Chacón

Desde que puedo recordar, me he vanagloriado de que conozco de revistas desde muy temprana edad y que la adicción sigue hasta tiempo presente. Así como para muchas personas, para mi fue VOGUE y algunas más, las que me abrieron la puerta a este fascinante mundo de la moda de par en par. La historia empezó cuando tenía 6 años y agarré mi primera revista VOGUE. Para los despistados o carentes de cultura general, VOGUE es el nombre de la revista de moda mas famosa e icónica del mundo, fuente de referencia de fotografía a nivel mundial y sinónimo de MODA en todo el sentido de la palabra. Repito, MODA en todo el sentido de la palabra. Obviamente no tenía la capacidad de leer la revista, aún mas estando en inglés; pero ese respeto, admiración y sentido de importancia por lo que tenía en mis manos era algo que lo podía notar hasta la señora que planchaba en mi casa. Créanme que lo hizo.

Hablar de lo que significa VOGUE para mi es básicamente hacer de esta columna un trabajo de auto-superación que te mandan a hacer en el Colegio San Agustín en sexto año, es por eso que hablaré de la importancia de las revistas en la vida de las personas, en la industria y sobretodo para qué deben servirte a ti, comprador o futuro consumidor de revistas de moda.

En esta era digital hemos visto avances gigantes en ciertas áreas, principalmente en la comunicación y la manera en como nos conectamos. Ya la comunicación no es lo de antes y se puede medir en el pulso de naciones consumistas que no dejan pasar un solo producto que saque Apple. Personas adictas a sus teléfonos, tablets, laptops… en fin, todo tipo de información se consume de manera diferente a como se hacia hace unos 5 años. Es un tema delicado pues el mundo se mueve a base de información, y hacia donde esta esté, allá estará la humanidad en su totalidad, esa fuente tendrá el poder. Si bien es cierto, hay personas que compran estos artefactos y dejan de lado ciertas costumbres, también hay los que nos hacemos aún mas apegados a la manera en como nos hemos informado toda la vida. Digo esto a nivel muy personal, pues, mi madre ha comprado todo periódico panameño, todos los días, desde que tengo uso de razón y les puedo asegurar que los lee todos de principio a fin. Si, así como ustedes leen su timeline de cabo a rabo o su news feed de Facebook, hay personas como mi madre que compran el periódico todos los días y se alimentan de eso.

Las redes sociales han sido la mayor parte de la evolución en términos de comunicación y créanme que no estoy en contra, todo lo contrario, soy una defensora de toda persona que se comunica por este medio. Twitter, mas que Facebook, ha sido parte fundamental de cómo nos pasamos la información de un país a otro en lo que a moda se refiere y fue el medio que pudo cerrar esa brecha entre personas que JAMAS han ido a un Fashion Week en París y esa editora que esta sentada en primera fila y sube una foto del set del desfile de CHANEL, para que esos fashionistas que están pendientes y la siguen, vean de primera mano como evoluciona uno de los eventos mas importantes de todo PFW. Nos permite también a los bloggers manejar una comunidad de personas que quieran estar al pie del cañón con tu blog y además quieran comunicarse con la versión 2.0 de tu persona. Esto no tiene precio y no puedo dejar de agradecerlo.

Retomando el tema que nos compete, debo confesar que soy de esas personas que le tienen mucho recelo a la tecnología y se aferran a los viejos métodos de ingerir información. Todos los meses invierto en un gran número de revistas que leo varias veces antes de apilar en lo que antes era mi escritorio y paso a convertirse en… sujetador de grandes pilas de revistas. No tengo la mas mínima idea de cuantas tengo, el único dato que les puedo dar es que colecciono todas las VOGUE desde el SEPTEMBER ISSUE del 2006. Para darles una idea, compró Glamour US, InStyle, Vanity Fair, NYLON, Harper’s Bazaar, Marie Claire y a las que tengo subscripción, ELLE, VOGUE y Teen VOGUE.

Ahora bien, ¿Cual es la diferencia entre comprar una revista en vivo, en papel, impresa, 3D a leértela online o comprar la aplicación respectiva que vaya con tu Smartphone o Tablet y así verla sin gastar mas de 99 centavos al mes? Señores la diferencia es la esencia. Una revista o magazín es la forma mas antigua de repartir información especializada sobre algún tema, que no solo es moda, puede ir desde pesca hasta gatos; es un mundo abierto para que las personas que aman cierto ambiente lo desarrollen y le den posibilidad a esas personas que también lo aman de tener un lugar donde leer y empaparse de información. No es lo mismo ver las fotos de un photoshoot épico que hizo Mario para VOGUE en la computadora, a verlo impreso en la misma revista. Es algo inexplicable.

Se me hace muy complicado poner en palabras la sensación de victoria que tengo cuando veo en el estante de Grand Morrison o Sanborns, la edición que me faltaba de cierta revista que compro. Es un alivio y francamente se siente muy liberador. Claramente tiene que haber una razón lógica para tal necesidad, que aclaro no solo tengo yo, tiene cada persona que conozco dentro de este medio, ya sea por una VOGUE especial o por V Magazine. Desde que estaba muy pequeña y era mi mama la que adquiría cada ejemplar, me decía que una revista además de informarte, debe servirte de inspiración para saber que ponerte en un momento determinado. A muchos nos pasa que tenemos gran cantidad de prendas en el closet, que tienen muchísimo potencial pero no sabemos como explotarlo al máximo. Si bien esta es una de las razones principales para comprar revistas, debo aclarar que uno no debe copiar todo idéntico. Hay una gran diferencia entre copiarse e inspirarse y creo que la gente no termina de entenderlo. Tomar fotos como referencia, ya sea tu estilo como el de Kim Kardashian o el de Alexa Chung, es perfectamente sano. Si, aunque no lo crean, no todo eso que ven en revistas, vidrieras e incluso colecciones es 100% original, todo es la combinación de algo, la manera en como el artista interpreta cierto momento y lo plasma. La gran diferencia radica en que tan bien interpretan unos esa inspiración en comparación con otros.

Me gustó mucho el artículo de Maristella González para BLANK referente a la renovación de la revista y la forma en como todo en nuestro país se hace para salir del paso y no nos sentamos a hacer un cambio que sea profundo y significativo para nuestra propia evolución. Tomare la parte en la cual se refiere a que vale la pena invertir en la creación de un formato nuevo para una revista, formato que incluye nuevos fonts, nuevas plantillas etc. Vale la pena porque quieres darle a aquellos que te leen un 100% de tus capacidades mentales, por ponerlo de una manera. Entregar lo mejor que pueda salir de tu cabeza y obviamente sea creable. Tienes el deber de darle un trabajo de calidad a aquellas personas que compran tu suplemento, periódico etc. Solos los buenos y los que conocen lo que hacen se dan cuenta de esto. También hay que recordar que no todo es exterior. El contenido es la parte fundamental de lo que vayas a ofrecer, es la razón por la que te van a recordar, leerán todas los meses y te catalogarán dentro de aquellos que escriben sin saber a quien me refiero cuando sigo Mario o aquellos que viven y se desgarran todos los días por la moda.

Cada vez que entres a mi cuarto, si es que algún día tienes esa dicha (estoy así), notarás que hay mas revistas que cualquier otra cosa. Las colecciono, las leo, las disfruto, las devoro, las ingiero y sobre todo, las respeto. Cada vez que sale una publicación de BLANK o cuando sale alguna revista nueva en nuestro país, atrévanse a comprar esa publicación que en 4 años te enseñara cual era el pulso social, cultural y fashion de nuestro país. Apoyemos a aquellas personas que quieren ver un cambio real en Panamá mediante las letras, sus fotos, sus confecciones, su arte gráfico y sobre todo con sus palabras. Si tienen algo que decir, díganlo y cuando alguien tenga que decir algo, escúchenlo. Seamos capaces de respetar y sentir que vale la pena comprar una VOGUE, no porque te de un status al sacarla por ahí, sino porque sabes que le vas a sacar el jugo en un 100%. Muchos se burlan de Labios Color Rosa, de lo que me pongo, de cómo uso tacones cuando nadie mas lo hace, de lo que gasto en revistas… en fin, a ellos les perdono porque no saben lo que dicen, es imposible hablar de algo que no conoces. Eso incluye moda y si no puedes aguantar el calor, salte de la cocina.

Por otro lado, no puedo evitar que mi corazón salte de alegría cuando veo que me están leyendo o cuando alguien a quien no le importaba nada de este medio empieza a preguntar e investigar sobre lo que es para no hablar en vano. Es igual cuando compro una revista o llega cualquiera a mi casa, es una alegría genuina. Algo que si les puedo decir con seguridad absoluta, es que no hay nada mejor que el olor de una VOGUE recién abierta. No miento. Averígualo tu mismo.

Nunca olvides: lo que no te mata, te hace mas fuerte.

               *De la columna Labios Color Rosa de 

 www.redindependiente.net

 *

"Dilema" ZARA

por Alexa Carolina Chacon

De este tema se ha escrito mucho y además muy bien. Hay Fashion Bloggers que han sabido captar a la perfección el concepto del cual hablaré esta oportunidad, el concepto de Fast Fashion y además cada uno le ha dado un matiz diferente. Pero como no puede ser de otra manera, quiero escribir sobre como veo esta tendencia que lleva ya varios años y de la cual todos somos parte. Bueno, casi todos.

Quiero empezar instruyéndoles un poco en lo que significa Fast Fashion y así vamos sintonizándonos. Fast Fashion es un término contemporáneo utilizado, para referirse a aquellos diseños que pasan de manera vertiginosa de las mejores pasarelas del mundo a una tienda X, con el fin de capturar las tendencias del mercado. Este movimiento se viene dando a cabo desde los anos 80, pero no fue hasta la década pasada que se empezó a notar una gran diferencia en el comportamiento del consumidor de moda a nivel mundial. La tienda pionera en la venta directa y sin matices de Fast Fashion es una muy conocida en nuestro país y afamada a nivel mundial, ZARA. Ésta y todas las demás tiendas están muy mal vistas por algunas personas que se encargan de hacer moda: diseñadores, editores etc. Y tienen razón para verlo con mala cara; CREAR moda, contrario a lo que todo el mundo piensa, es un proceso digno de admirar que requiere sudor, esfuerzo, creatividad, ideas y lágrimas antes de poder ver la luz y salir al mercado. Copiar sin asco alguna de esas piezas es algo muy difícil de aceptar por personas que conocen la industria desde dentro. Más adelante seguiré con este punto.

Ahora, contar la historia de ZARA seria una perdida de tiempo pues basta con ir a San Google y buscarlo, pero analizar la manera en como cambio el mercado, la moda y la manera en como vemos la industria, si es digno de mi tiempo y del suyo.

Toda esta necesidad de escribir sobre el tema comenzó cuando muchos empezaron a contarme que usarían para Fashion Week Panamá, el evento de moda más importante de Centroamérica. Gran cantidad de personas usarán outfits confeccionados por diseñadores panameños. Esto es lo ideal para un Fashion Week, representar de manera personal tu estilo mediante la visión de diseñadores de tu propio país; es como celebrar con tu persona la moda nacional. El gran problema de esta idea, que repito es lo ideal, es el dinero. Como todo buen arte, un vestido de diseñador cuesta mucho dinero. Debo aclarar que lo vale, un diseño nacional vale cada hilo y puntada que tenga, pero si eres una universitaria de 18 años que no trabaja, el presupuesto se complica. Es ahí en donde entra en función ZARA, nuestra tienda predilecta de Fast Fashion.

Yo uso ZARA siempre. No sólo para outfits de Fashion Week, sino para vestirme durante todos los días de mi existencia. Esta tienda me ha visto crecer en cuanto a estilo, y así mismo ha sabido como suplir mis necesidades. Debo admitir que compro ahí más de lo que debo, pero es lo que hay. Para FWP usare ropa de ZARA, H&M (segunda mayor tienda de Fast Fashion a nivel mundial) y si Dios quiere, un vestido de Vergara & Vergara (diseñadores nacionales), y lo digo sin asco. Pero es aquí donde llegamos al clímax del asunto. Voy a tratarlo por puntos para no atrofiar sus mentes.

Como primer punto tenemos el hecho que toque hace un momento, es Alta Costura vs. Fast Fashion. Existe ese temor y descontento dentro de las grandes casas de moda que saben que tarde o temprano alguna de sus piezas se verán recreadas en telas de mucha menor calidad y con menos detalles a la hora de la confección. Es básicamente rebajar una pieza hecha completamente a mano por algún costurero de profesión, con las telas mas exquisitas, y ponerle un polyester barato, menos detalles a la hora de coserla y botones que pueden caerse después de la primera lavada. Ojo, es importante que sepan que ZARA tiene diferentes lineas de ropa y así mismo costaran las piezas. Son muchísimas las subdivisiones que tiene ZARA, tantas que nos servirían para hacer otro post. Las grandes casas tienen ese reto constante de competir temporada tras temporada con la creciente demanda que tienen estas tiendas y tratar de alguna manera, de no dar mucho tiempo para que se copie el diseño. Una tarea de titanes.

El segundo punto es la calidad. JAMÁS podrás comparar la calidad de una tienda  Fast Fashion con la de una de la Alta Costura, esto esta tácito sobre entendido. Es por eso que algunas piezas de las subcolecciones de ZARA, no duran nada. Esto es un punto que el consumidor panameño no termina de entender. Piensan que comprar en ZARA es tal vez un lujo y es por eso que exigen máxima calidad y que las cosas duren de por vida, sin saber que arriba de lo que vende esta tienda, está lo que es de verdadera calidad y les aseguro si les durará de por vida.

Para finalizar, lo más importante a saber cuando se va a comprar, muchas veces por necesidad, en cualquier tienda Fast Fashion: todo el mundo tendrá lo mismo. Porfavor, léanme muy bien: todo el mundo tendrá lo mismo que tú, porque es accesible, bonito y esta de moda. Punto. Pero es aquí donde entra mi granito de arena en todo este tema. A mi concepto, es aquí donde está el verdadero reto. ¿Qué hacer con algo que tiene todo el mundo? ¿Eres lo suficientemente bueno como para hacer algo diferente? ¿Qué harás con aquella falda verde que compró hasta la persona que peor te cae en el mundo? ¿Eres lo suficientemente bueno como para impresionar a las personas indicadas con esa falda ZARA, que para colmo, todo el mundo sabe que es ZARA? El reto esta en demostrar nuestra calidad como amantes de la moda, al hacer algo diferente mezclando piezas vintage con piezas nuevas, que llame la atención, que sea chic y sea digno de estar en cualquier blog de moda internacional y nacional.

He aquí lo hermoso de comprar este tipo de ropa, si bien la tiene todo el mundo y es una copia de la original, nos presenta ese reto diario y constante de hacernos sentir en la industria como verdaderos conocedores de lo que más amamos.

Fashion Week Panama es en dos semanas y muchas personas estarán usando ZARA, orgullosamente incluyendome. El 14 de Julio cuando todas nos veamos las caras, estaré más orgullosa aún de lo que llevo puesto, pues para mí el Fast Fashion dejó de ser un dilema, ya entró en categoría de solución. See you in the runway.

Extrema izquierda, Olivia Palermo, estrella del reality show The City y Fashion Icon usando un vestido corto de ZARA de la pasada temporada para el Couture Show de Stephane Rolland. Extrema derecha, la princesa mas hermosa del mundo, Carlota Casiraghi, usando un collar de aluminio y plumas de ZARA en color Azul Cobalto. Al centro la autora con la falda en el patron del vestido y el collar en amarillo... cosas que pasan.

*De la columna Labios Color Rosa de 

 www.redindependiente.net

 *