Aquel hombre con un cuervo en el hombro y una extraña mirada....

Desde hace mucho tiempo tengo una extraña y porque no decirlo, bizarra fijación por los colores, vestuarios y fotografía de los filmes de Alfred Hitchcock. Este hombre de personalidad rara y de ideas que facilmente se pueden ajustar a nuestro tiempo como brillantes obras maestras llenas de suspenso que se agarran de nuestra ultima neurona cuerda y estable, para hacernos tener fobias a cosas tan indefensas como una GAVIOTA. (The Birds)
Pero no hablare de la filmografía como tal, no soy critica de cine, hablare de la moda que se imponia en los filmes de Hitchcock. Desde Psycho hasta Marnie, nos deleitamos con un sin numero de estrellas y historias que han fascinado a mas de uno alrededor del mundo y con ello, convirtiendo a Alfred en un verdadero icono de un cine de suspense que vale la pena.
Vanity Fair en el año 2008 hizo un homenaje muy digno de sus paginas historicas a un hombre que rompio todo esquema e hizo lo que mejor sabia hacer.
Tomando a artistas contemporaneos vemos imagenes como estas